‘En la Torre’, una exposición que el pintor Guzpeña dedica a sus vecinos de Almanza
Este sábado 10 de agosto, el artista leonés Enrique Rodríguez García “Guzpeña” inaugura una exposición individual con pinturas y dibujos en la Torre de Almanza (León). Se podrá contemplar hasta el próximo 18 de agosto, en horario de 12 a 14 y de 19 a 22 horas.
La exposición “En la Torre” ofrece una selección de algo más de cuarenta obras, la mayoría de pequeño formato, realizadas por Guzpeña a lo largo de una veintena de años. No se trata de una exposición en la que el artista haga referencia a un único tema escogido de entre las variadas series temáticas en las que ha trabajado. Tampoco trata de recoger las últimas creaciones, las más novedosas y recientes obras de su producción plástica:
“Esta exposición es una pequeña muestra antológica dedicada muy especialmente a mis vecinos de Almanza, localidad en la que resido desde hace ya casi treinta años. Y como me conocen y saben el aprecio que tengo a mis paisanos sabrán reconocer en esta exposición un pequeño homenaje hacia ellos, por que al fin y al cabo son las personas con las que convivo diariamente y las que quiero que disfruten de mis creaciones”, señala Guzpeña.
Las peculiaridades de la Torre de Almanza, el edificio más emblemático de la localidad, también han condicionado la selección de obras que forman parte de esta exposición, ya que el artista ha debido adaptarse a las especiales características de paredes y espacios.
Se trata de una torre de cuatro plantas —28 metros en total— levantada en el punto más alto del pueblo. Recientemente se ha realizado una reforma integral de su interior que permite hacerla visitable. Además, se ha restaurado el antiguo reloj, del que se puede apreciar su mecanismo. Cabe reseñar también las espectaculares vistas que la Torre, un lugar con una magia especial, ofrece de la ribera del Cea.
Emoción y misterio
“Sobre las obras que componen la exposición podría decir que juegan con símbolos y signos, con emociones y sentimientos, intentando construir un particular lenguaje plástico”, explica Guzpeña. “Mi manera de pintar, de trabajar, apuesta por la factura libre y bien terminada, la delicadeza y sutilidad del colorido, la firmeza de la linea y del dibujo y la forma geométrica que no renuncia al volumen. A todo ello se añaden los cuidados contrastes de luces y sombras, gradaciones cromáticas, perspectivas y profundidades. Se trata de una obra que no encuentra fácil clasificación”.
“Cuando creo mis obras no trato de reflejar el mundo que me rodea, sino otra realidad producto de la imaginación. Al tratar de expresar esa visión interior las obras presentan retazos de formas conocidas. Las formas siempre mantienen el recuerdo de una realidad reconocible”, añade.
Y dice más: “Quiero trabajar con criterio, con sobriedad. Desearía que mi obra transmitiese emoción y misterio al ser contemplada. El arte puede no significar nada, pero tiene un sentido que nos hace disfrutar y vivir de otra manera. El arte se realiza para intentar mejorar el mundo y al hombre. El arte es, ante todo, generosidad, trabajar para crear obras que emocionen, que hagan disfrutar a otras personas. No es lo mismo vivir con el conocimiento del arte que ser ignorantes de su existencia. El arte nos ofrece un mundo diferente y libre”.
Fuente: Sahagún Digital y TamTamPress